"¿Quién podrá interceder ante Él si no es con Su permiso?".

Nadie puede interceder y ser defensor de parte de alguien sin el permiso y la complasencia de Dios. Al-lah tiene control perfecto de todo. La intercesión es por gracia y misericordia de Dios, y está reservada para el Día del Juicio, únicamente para aquellos a quienes Dios les permita interceder, como los profetas y los piadosos. En cuanto a aquellos que adoran falsos dioses, no tendrán derecho a intercesión en ese día.

En el Islam la salvación depende principalmente de la fe y las obras de la persona, y la intercesión solo será permitida a favor de quien la merezca, quien no alcanzó el objetivo, pero iba por el camino correcto. En contraste, las dos grandes religiones anteriores, el judaísmo y el cristianismo, se han basado en gran medida en una intercesión ilimitada, sin restricciones, para lograr la salvación.

La negación del amor y la intercesión en el Más Allá se refiere a los incrédulos. Los sentimientos de amor entre los creyentes sobrevivirán. En consecuencia, ellos intercederán unos por otros con el permiso de Dios.

 "Solo podrán interceder por quienes Dios se complazca" (Corán 21:28). 

El Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo:

"La gente acudirá a mí y yo procederé a buscar el permiso de mi Señor. Se me otorgará una licencia. Cuando Lo vea, caeré prosternado. Él me permitirá permanecer así hasta que Él quiera. Luego será dicho: ‘¡Muhammad, levanta tus manos y pide, serás escuchado! Intercede, y tu intercesión será concedida’. Entonces alabaré a mi Señor con palabras que Él me revelará a continuación. Luego comenzaré a interceder, pero será establecido un límite (acerca de qué tipo de gente podrá recibir mi intercesión). En consecuencia, voy a sacarlos del Fuego y los acomodaré en el Paraíso".

"Conoce el pasado y el futuro [lo manifiesto y lo oculto]".

El conocimiento de Dios es absoluto, y no está condicionado por el tiempo ni el espacio.

Él conoce el estado de Su creación. Él sabe qué fue, qué es y qué será. Conoce lo que está oculto y lo que está manifiesto. Sabe lo que Sus criaturas lograron y lo que perdieron. Conoce lo que estas hicieron en el pasado y lo que harán en el futuro. Sabe lo que ocultan y lo que muestran. Nada escapa a Su conocimiento. Nada Lo confunde. Su conocimiento es ilimitado, mientras que el de la creación es limitado. Como dice Dios en otro lugar del Corán: "Él bien sabe tanto lo que dicen abiertamente como lo que dicen en secreto" (Corán 21:110).

Dios está al tanto de nuestras obras y acciones, y controla lo que cada quien merece. Él tiene visión perfecta sobre todas las cosas. A Él pertenece cuanto hay en los cielos y en la tierra, lo que indica que todas las criaturas están bajo la soberanía divina.

La suerte y el destino están bajo el control de Dios y Él sabe lo que les ocurre a Sus criaturas en este mundo, y lo que les ocurrirá en el Más Allá. Dios tiene conocimiento perfecto de toda la creación y de su pasado, presente y futuro.

"… y nadie abarca de Su conocimiento salvo lo que Él quiere".

Todo conocimiento proviene de Dios y jamás podremos aprender excepto lo que Él quiera.

Dios ha bendecido a los seres humanos con el don del conocimiento, pero no importa cuánto progrese el conocimiento humano, siempre será una gota en el océano comparado con el conocimiento divino. Los seres humanos apenas si son capaces de conocerse bien a sí mismos, ¿cómo pueden imaginar captar el conocimiento del mundo de lo oculto? Ninguna de las creaciones sabe nada de lo oculto, excepto los profetas a quienes se les otorgó un cierto conocimiento de ello.

"El escabel de Su Trono abarca los cielos y la Tierra".

Así como el conocimiento divino abarca toda la creación, el Kursi –es estrado de Dios– abarca todo el universo. Esa es la grandeza de Dios.

El Kursi no es nada en comparación con el Trono, apenas se asemeja a un anillo arrojado en una amplia llanura (Ibnu Hibán). Y si el Kursi es así, entonces ¡cómo es el Trono de Dios, el más Glorificado y Exaltado!

Por lo tanto, toda la creación en relación a Dios es muy pequeña y es nada en comparación con Él. Si solo una cosa de la creación de Dios, el Kursi, es más grande que los cielos y la Tierra juntos, pero sigue siendo mucho más pequeña que el Trono, entonces Dios, el Poderoso y Majestuoso, es superior a todo.

"… y la custodia [y mantenimiento] de ambos no Lo agobia".

Nada Lo debilita. Mucho o poco, fácil o difícil, más o menos, grande o pequeño, Al-lah lo preserva todo y esa labor no Le resulta costosa en lo más mínimo.

Él no siente cansancio en la protección y preservación de los cielos y de la Tierra, y esto indica que Dios no puede ser comparado a nada mortal. Proteger los cielos y la Tierra y todo lo que hay entre ellos, no Le significa una carga ni Le causa fatiga; al contrario, esto es fácil para Él.

La frase "la custodia [y mantenimiento] de ambos no Lo agobia" es una expresión de la omnipotencia de Dios, representada en términos simples pero poderosos, sobre lo fácil que es para Dios sostener y preservar los cielos y la Tierra.

"Y Él es el Sublime, el Grandioso".

Él está en la cima de toda altura y en el pináculo de la grandeza más allá de la imaginación humana, como corresponde a Su Majestad.

Dios es el Altísimo, no hay nada por encima de Él y nada se asemeja a Él. Dios es el Poseedor de la majestad y la santidad, la perfección y la gloria, la belleza y la grandeza. Nada es más grande que Él, pues Dios es el Supremo, el Grande.

No importa cuán poderoso o grande pueda llegar a ser un ser humano, jamás se elevará por encima de ser un siervo de Dios. Una vez se establece firmemente este hecho en la mente del hombre, mejora su condición como subordinado de Dios y refrena su orgullo y transgresión. Él temerá realmente a Dios y apreciará Su majestad y poder, y buscará ser más humilde hacia Dios y menos soberbio en su trato hacia sus semejantes.