Dios lo creó todo

Entonces, ¿cómo comenzó todo? Dios. Nada más. Se le preguntó al Profeta del Islam (la paz y las bendiciones de Dios sean con él): "¡Oh, Mensajero de Dios! ¿Dónde estaba nuestro Señor antes de crear Su creación?". Respondió: "Nada existía sino Él, sin nada debajo de Él y nada sobre Él"[1].

Piensa en lo sorprendente que es esto, básicamente nos dice que no hay nada realmente valioso sino solo Dios, la creación necesita de Dios y de nada más, porque al principio solo había Dios y no existía nada más.

Dice Dios en el Corán:

"Dios es el Creador de todas las cosas, y Él es su Custodio" (Corán 39:62).

Así que todo, aparte de Dios, fue creado por Él, está bajo Su dominio y Su disposición, y Él lo trajo a la existencia.

Yubair, un contemporáneo del Profeta Muhammad, se describe a sí mismo diciendo: "Yo era uno de los peores enemigos del Profeta, lo odié más que a ningún otro ser humano sobre la faz de la Tierra". Pero entonces, algo extraño ocurrió. "Una vez yo entraba caminando a la mezquita y escuché al Profeta recitando aleyas de la sura El monte (Corán 52:35-36): ‘¿Acaso surgieron de la nada o son ellos sus propios creadores? ¿O crearon los cielos y la Tierra? No tienen certeza de nada’".

Yubair dice que en el momento en que el Profeta dijo eso, incluso aunque no aceptaría el Islam oficialmente en su vida sino hasta mucho después, "la fe entró en mi corazón, y supe en ese momento que no hay posibilidad alguna de que no exista Dios".

Si simplemente te sientas contigo mismo y pasas por el proceso de eliminación de probabilidades de cómo nosotros y todo lo que nos rodea está aquí, encontrarás que no hay otra manera de explicarlo sino por Dios.

La creación del agua, el Trono (Arsh) y el Escabel (Kursi)

El Profeta Muhammad dijo: "No existía nada excepto Él, con nada debajo de Él ni nada sobre Él. Entonces, Él creó Su Trono sobre el agua"[2].

El Profeta nos dice que al principio estaba Dios y nada más. Entonces, Dios creó el agua y el Trono (Arsh). Estos fueron creados de manera independiente de cualquier ángel, antes de que fueran creados los cielos y la Tierra. El Profeta Muhammad dijo: "Estaba Dios y no había nada más aparte de Él, y Su Trono estaba sobre el agua. Escribió todas las cosas en el Libro (en el cielo) y creó los cielos y la Tierra"[3].

Dios menciona muchas veces en el Corán que Él es el Señor del Trono Glorioso, porque esa es una de Sus creaciones más magníficas e importantes.

El Kursi es un escabel que es como un peldaño hacia el Trono, y Dios está sobre el Trono y, sin embargo, nada está oculto a Él. En la aleya más grandiosa del Corán, conocida en árabe como Ayat ul Kursi, o "la aleya del Escabel", antes de que Dios mencione Su Escabel, menciona Su conocimiento (Corán 2:255).

Solo Su Kursi, el Escabel, tiene bajo él todos los cielos y la Tierra (Corán 2:255). El Profeta Muhammad dijo: "El Escabel, en relación al Trono, no es más que un anillo de hierro lanzado en un desierto a campo abierto sobre la Tierra"[4]. Además, Ibnu Abás dijo que, si el Kursi abarca todos los cielos y la Tierra, entonces ¿qué tan grande es el Trono? No tenemos la menor indicación de cuál es el tamaño del Trono, y es obvio que no podemos calcular la grandeza de Dios Mismo.

Dios no está lejos, Él hace hincapié en todo el Corán de que Él está con nosotros donde quiera que estemos. En la sura El hierro (capítulo 57), inmediatamente después de que Dios nos dice que Él se estableció sobre Su Trono, nos dice que Él conoce todo lo que entra y sale de la Tierra, todo lo que asciende y desciende del cielo. En resumen, Él conoce hasta la minucia todo detalle de absolutamente todo (Corán 57:4). Sabemos que Al‑lah está sobre Su Trono, pero Él es Omnipotente y Su conocimiento lo abarca todo.

Además, Dios habla acerca de los grandes ángeles que cargan el Trono. Ellos son criaturas enormes y magníficas, de los mejores ángeles de Dios. En el Día del Juicio, Dios nos dice que serán ocho los ángeles que llevarán Su Trono (Corán 69:17). El Profeta dijo: "Se me permitió hablar de uno de los ángeles de Dios Todopoderoso, que es uno de los portadores del trono, y [decirles a ustedes] que la distancia entre su lóbulo de la oreja y su hombro es un viaje de setecientos años" (Abu Dawud). También se narró este dicho con esta redacción: "La distancia es [como] la de un pájaro volando durante setecientos años" (Ibnu Abi Ásim).

¿Qué están haciendo esos ángeles?

Dios nos dice que esos ángeles que cargan Su Trono y quienes lo rodean, lo glorifican, lo alaban, creen en Él y piden perdón por aquellos que creen. Oran por ellos diciendo: "¡Señor nuestro! Tú lo abarcas todo con Tu misericordia y sabiduría. Perdona a quienes se arrepienten y siguen Tu camino, y presérvalos del castigo del Fuego" (Corán 40:7).

Ellos están glorificando a Dios y declarando la perfección de Dios para mostrar que Dios es independiente del Trono y es independiente de quienes llevan el Trono. Dios no necesita a quienes cargan el Trono.

El Cálamo

Después de la creación del agua y del Trono, Dios creó el cálamo. Cuando el Profeta dijo que Dios creó el cálamo, dijo que Su Trono estaba establecido sobre el agua, que hay una capa de agua bajo el Trono de Dios.

"Dios ordenó las medidas de la creación cincuenta mil años antes de crear los cielos y la Tierra, mientras que Su Trono estaba sobre el agua"[5].

¿Cuáles son las dimensiones del Cálamo? ¿Qué aspecto tiene? No tenemos la más mínima idea.

Dijo el Profeta: "Dios le dijo al Cálamo: ‘Escribe’. Y este dijo: ‘¡Oh, Señor! ¿Qué debo escribir?’. Él le dijo: ‘Escribe los decretos de todas las cosas hasta que comience la Hora’"[6].

La Tabla Protegida (Al Lauh Al Mahfud)

El Cálamo, que fue creado 50.000 años antes que los cielos y la Tierra, escribió en lo que conocemos como Al Lauh Al Mahfud, la Tabla Protegida. Dios la llamó Al Lauh Al Majhud porque está protegida de cualquier cambio, y también está protegida de todo acceso. Todo está en ese Libro, hasta la caída de una hoja de su árbol, como Dios mismo nos dice. Todo lo que ha ocurrido, lo que ocurre y lo que sucederá está escrito allí.

Lo que la Tabla hace es establecer la confianza del creyente en Dios, de que lo que Él escribió fue escrito para nuestro bien, y que todo ocurre por una sabiduría. A veces, podemos entenderla, pero en otras ocasiones nos consolamos y satisfacemos con saber que Dios sabe bien lo que hace.

Los cielos y la Tierra

Refiriéndose a lo que los científicos de la actualidad denominan la Gran Explosión (Big Bang), el Corán dice: "¿Acaso los que se niegan a creer no reparan en que los cielos y la Tierra formaban una masa homogénea y la disgregué, y que creé del agua a todo ser vivo? ¿Es que aún después de esto no van a creer?" (Corán 21:30).

Con base en la aleya anterior, algunos eruditos afirman que Dios creó los cielos antes de crear la Tierra. "¿Acaso piensan que ustedes fueron más difíciles de crear que el cielo que Él edificó? Él lo elevó y perfeccionó su construcción. Dios hizo que la noche fuese oscura y que le sucediera la claridad de la mañana. Luego extendió la Tierra" (Corán 79:27-30).

Dios dice en el Corán:

"Su Señor es Dios, Quien creó los cielos y la Tierra" (Corán 7:54).

Dios no necesitó en realidad seis días, Dios simplemente pudo haber dicho "sé" y habría llegado a existir. ¿Por qué Dios crearía en seis días o eras, en lugar de hacerlo en un segundo o menos? Quizás Dios quería enseñarnos una de las cualidades que Él ama, que es tomarse las cosas con calma y planearlas apropiadamente.

Mares, ríos y lluvia

Dios nos dice que Él es Aquel que creó los cielos y la Tierra, envió la lluvia del cielo, produjo frutas y sustento para nuestra supervivencia. Dios nos proporcionó mares y naves para navegar por ellos. Dios puso los ríos a nuestro servicio y ubicó el Sol y la Luna en sus órbitas. Dios puso a nuestro servicio el día y la noche. Dios dice que Él nos ha dado todo lo que necesitamos para nuestro sustento. Si fuéramos a contar las bendiciones que Dios nos da, no podríamos hacerlo (véase Corán 14:32-34).

"Él es Quien ha puesto al mar a servicio de ustedes para que puedan comer de él carne fresca y extraer adornos para engalanarse. Pueden ver los barcos surcarlo y usarlos para buscar la gracia de Dios [su sustento]. ¿Por qué no son agradecidos?, dispuso ríos y caminos para que puedan guiarse, Dios afirmó la tierra con montañas para que se estabilizara y también señales, y para que se orienten en sus viajes, [creó] las estrellas. ¿Es procedente comparar a Quien es capaz de crear con quien no puede crear nada? ¿Acaso no recapacitan? Si intentaran contar las gracias de Dios no podrían enumerarlas. Dios es Absolvedor, Misericordioso" (Corán 16:14-18).

La Tierra nos beneficia de múltiples formas. Si mira la superficie de la Tierra, Dios dice que Él la hizo especial para nosotros, lo que significa que nos resulta fácil pisarla. Ahora, imagina que fuera áspera y difícil para caminar. Él hizo la superficie suave de modo que podamos cavar en ella y plantar cosas. Pero, al mismo tiempo, hizo la tierra estable y firme, lo suficiente para permitirnos la construcción a partir de sus propios materiales. Él también creó la gravedad, de modo que no estemos flotando en el espacio.

El Sol y la Luna

El Sol es una creación magnífica de Dios y encontrarás que Dios jura por el Sol en la sura 91 (El Sol), a fin de otorgar mayor aprecio a este regalo que Él nos ha dado. Muchas religiones del pasado otorgaron cualidades especiales al Sol y mucha gente lo adoró. Dios dice:

"Entre Sus signos están la noche y el día, el Sol y la Luna. Si realmente es a Él a Quien adoran, entonces no se prosternen ante el Sol ni ante la Luna" (Corán 41:37).

Existen muchas supersticiones respecto al Sol, la Luna y las estrellas, e incluso personas racionales han sostenido dichas supersticiones extrañas. La gente a menudo hace a un lado la lógica cuando se trata de supersticiones. Tenemos la astrología, los horóscopos y otras cosas similares que no tienen el más mínimo sentido, pero que le dan a la gente esperanzas vanas o una razón para su paranoia. El Islam prohíbe por completo acudir a los adivinos o creer en ellos.

La creación de los ángeles

Luego, Dios creó a los ángeles a partir de la luz. Ellos son incapaces de desobedecerlo, y hacen exactamente lo que Él les ordena. Son responsables de llevar a cabo una serie de tareas. Por ejemplo, Gabriel fue responsable de transmitir la revelación de Dios a los mensajeros. Dios, al enseñarnos acerca de los ángeles, nos aclara la integridad del mensaje tal y como descendió a los mensajeros, entre muchas otras cosas.

Algo único en relación a la creencia islámica en los ángeles es que no creemos en ningún ángel caído, y no creemos que el demonio hubiera sido un ángel.

Por otro lado, los ángeles no son robots. Ellos tienen su propio carácter y opinión, aman y odian, oran y tienen ciertas inclinaciones, pero todo dentro del ámbito de la obediencia a Dios.

La creación de los yinn

Ellos fueron creados de fuego, pero no de cualquier forma de fuego, sino de una llama sin humo[1]. Dios los creó antes que a nosotros. Su propósito, en esencia, es el mismo de los seres humanos: adorar y servir únicamente a Dios.

La creación de la humanidad

El primero humano creado fue Adán. La historia de su creación y los eventos que siguieron han sido cubiertos en detalle en otro artículo en nuestro sitio web[2].